Con unos cuantos trozos de camino hechos ya has pasado por
muchos sitios, parajes, iglesias, cruceiros, cuestas arriba y abajo, aldeas,
pueblos ciudades…algunas quedan en la memoria, la mayoría se olvidan, y unas
pocas pasan al salón de la fama de los recuerdos. Entre Orense y Castro Dozón
hay una de estas últimas: la costiña de Canedo.
Dos kilómetros de distancia para doscientos sesenta y dos metros de desnivel.
Un promedio del trece por ciento con algún pico del veintidós.
Soltar aquí estos datos probablemente es una ordinariez y os
aburra pero no deja de tener su gracia la retranca gallega: “Costiña”…
En el Primitivo, nada más dejar La Mesa hay una cuesta de cerca de un kilómetro con un desnivel de 150 metros. Creo que podemos ponernos de acuerdo: la mía es más gorda y la tuya más larga.
ResponderEliminarHombre, es que a quién se le ocurre ponerse a subir cuestas justo después de comer (nada más dejar "La Mesa"...).
ResponderEliminarPóngase aquí el emoticono que Vd. desee: sugerimos el de la carcajada con lagrima bilateral o el que enseña los dientes dando a entender que quizá la gracia no lo es tanto.